miércoles, 18 de julio de 2012

Educación obligatoria del oprimido


 En preescolar me enseñaron que podía aprender lúdicamente. Y valorar al que tengo a mi lado. Todo lo que pasara por mi alma, y se expresara mediante mi cuerpo… era arte. Y el arte me hacía feliz. Era mi creación cada forma de expresión. No me lo prohibían.
La música, los dibujos, la representación teatral era creada por el instrumento de mis manos, mis miradas, mis gestos, mis movimientos.
Hoy soy eso. Hoy debo lo que sé… sólo a esos años educativos. Sabía leer lo suficiente. Sabía contabilizar lo suficiente. Sabía comprender el mundo lo suficiente para no sufrir y seguir creciendo. De trece años de obligatoria educación… solo uno utilizo como praxis cotidiana.
Por que antes de la escolarización me enseñaron algo que luego iban a limitar y desvalorizar. Hay egresados capaces de vivir el mundo sin esas primeras enseñanzas donde no había filas que respetar, ni saludos obligatorios, ni canciones permitidas, ni historias oficiales. Hay un mundo lleno de patologías del oprimido. Un mundo lleno de actores sociales llenos de miedo a jugar
También hay muchos con ganas de ser feliz y concretar ese sueño. Y hay muchos actores sociales que quieren contagiar ese ánimo. Mis palabras son sencillas. Mis dibujos no van a ser parte de un museo. Mi voz no es la más entonada. Mi forma de actuar no me va a convertir en la estrella del espectáculo que más hablan las revistas. Mi arte me salva. Me protege. Me da medios para aceptarme y aceptar.  De crear dispositivos para un mundo sin divisiones. Un mundo que expresa y es feliz.
Recuerdo cuando me regalaron mi primer instrumento musical… recuerdo cómo antes hacía la mímica como tocándolo.  Recuerdo la alegría cuando tuve mi valijita llena de oleos y el olorcito que jamás olvido… y recuerdo como mi hijo dibujaba con un carbón sobre el suelo antes de que los grandes prendamos el fuego. Recuerdo a mi abuela enseñándome una cámara de fotos instantáneas… y me recuerdo encuadrando con mis dedos sobre el aire momentos que solo están en mi memoria.  El arte nos transforma. No necesitamos mucho.  
Solo liberar todas las opresiones y tener como meta ser feliz. Podemos hacer de la vida un arte y tener como meta un futuro con una educación más preescolar!

1 comentario:

  1. SENCILLOS RECUERDOS RECORDADOS CON GRAN AMOR...COMO GOTAS DE LLUVIA, REFRESCANDO MOMENTOS,AL ARTE LO HICISTE Y EL ARTE TE HIZO,RECUERDO... RECUERDO... AHORA QUE ME ACUERDO YO TAMBIEN RECUERDO. PENSANDOLO MEJOR, HACES ARTE AUQNUE MIENTRAS VAS SIENDO SIDO ARTE.

    ResponderBorrar